Ese día, el ambiente era algo extraño, se sentía un frío extremo pero tenía algo particular, no se podía percibir la fría mano de la muerte, acechando para descubrir una nueva víctima, en pocas palabras era un frío cálido, ustedes entienden.

En la casa de nuestros protagonistas, se sentía ese peculiar ambiente, así que para evitar algun leve resfriado, se mantuvieron todo el tiempo con un sueter encima, menos Sanford, el, como decirlo, el frío no le afecta...? Y tampoco es como si Hank se pudiera enfermar.

Bueno, de regreso al tema, ese frío los mantendría dentro de casa por solo un corto periodo de tiempo, así que lo aprovecharian a lo máximo, Sanford jugaría todo lo que quedará de tiempo el Roblox, 2BDamned ni siquiera se encontraba ahí, así que no haría nada, al menos no en casa.
Por otro lado, Deimos fumaba dentro de su habitación con la ventana abierta, y Hank, fácilmente podría salir de casa sin problema alguno, puede que haya perdido el sentido del tacto y la habilidad de sentir un poco de dolor, así que probablemente no sentiría frío, pero se quedó en casa, dando vueltas por la sala, sin saber qué hacer exactamente, podría leer, usaría una de las laptops que habían por la casa para jugar algún juego, o quizás solamente se quedaría sentado en su sillón por lo que resta del día, hasta que recordó algo que había pasado hace unos pocos días atrás, Deimos le había invitado a una clase de cita para ver un anime, aunque él no tenía idea de que era un anime, no le haría daño averiguarlo.

Mientras tanto, en el segundo piso se escuchaban los ruidos de los juegos del Roblox y las rabietas de Sanford al perder en estos, Deimos no provocaba ni un solo sonido.

Hank caminaba por el pasillo del segundo piso, pero antes de ir con el de la gorra, entro a la habitación del gamer.

— Estoy ocupado Deimos, ahora no puedo ayudarte a instalar Minecraft.

— Sanford — La voz áspera y grave de Hank provocó que el contrario voltease a verle con desconcierto.

— Oh, lo lamento jefe, no sueles entrar a mi habitación.

— Solo vine a ver si necesitabas algo.

Sanford abrió los ojos como platos, ese definitivamente no era Hank, pero bueno, esto es un AU, no hay muchas cosas fieles a la historia original.

—...Hank, sal de casa y has una matanza porfa.

— Ahorita — Y sin más azotó la puerta y se dirigió a la otra habitación.

Continuó su camino y entro sin siquiera tocar, muy el de su parte.
Deimos no le dió importancia y continuó con lo suyo, hasta que vio sangre hiperrealista y ojos negros con pupila roja... Ejem.

Termino de fumar y tiro la colilla a través de las barras y el cigarro lo tiró a la basura. Se dió media vuelta y vio a Hank sentado en su cama mientras habria Netflix

— Aunque sea saluda maldito. — Se acercó y se sentó a su lado a ver qué estaba haciendo y se sorprendió al ver que había puesto el anime y no desde el Stardust Crusaders, ahí es mijo.

— Apaga la luz, hoy y mañana será un maratón de esto. — Sin esperar más tiempo se levantó a apagar la vela.

El resto del día fue tranquilo, se notaba que ambos estaban disfrutando lo que se encontraban haciendo, pero no solo eso, si no también si compañía.

Se quedaron hasta tarde viendo el anime, Deimos cayó dormido en medio de un capítulo y no despertó hasta el día siguiente, Hank, para no despertarlo se quedó ahí, como si se tratara de un gato del cual te sientes bendecido por tener el privilegio de que se haya dormido en tus piernas, algo parecido.

En la madrugada del día siguiente, Sanford entro a la habitación para entregarle una carta que le había llegado a Deimos, pero al ver cómo el jefe y el "gato" dormían tranquilamente, solamente les tomo una foto y salió del cuarto.

Ese día continuaron con el maratón, vieron todos los capítulos que pudieran, pues el día siguiente tendrían que arreglar asuntos, pero por ahora disfrutarían su compañía, haciéndose cada vez más cercanos que antes.

Hola
Y adiós skdk